Rafael Catalá señala que la Ley de eficiencia del servicio público de justicia "será un espaldarazo para hacer de la mediación una realidad en España"
Esto se debe a que la futura norma, que se encuentra en tramitación parlamentaria tras su aprobación en Consejo de Ministros el pasado mes de marzo, “establecerá la obligatoriedad de pasar por métodos alternativos como la mediación antes de llegar a los tribunales”. Gracias a ello, “esperamos que la aprobación de esta ley se convierta en una realidad pronto y que varios cientos de miles de asuntos se solucionen por vía de la mediación y que así alivien la carga en los tribunales”.
Así lo ha afirmado durante la jornada “La mediación, otra forma de resolver conflictos y potenciar la competitividad y la salud de las empresas", organizada junto a la Cámara de España, la Institución de Mediación de las Illes Balears y la Cámara de Comercio de Mallorca –donde se ha celebrado el acto-.
El vicepresidente del CEM y secretario general de la Cámara de España, Adolfo Díaz-Ambrona, que ha moderado la mesa redonda, ha definido a la mediación como “un factor de competitividad de las empresas, la cultura de la mediación supone una ventaja desde el punto de vista económico y desde el punto de vista del mantenimiento de las relaciones comerciales entre empresas”.
La Ley Orgánica de eficiencia del servicio público de justicia es “una buena ley que va a suponer un espaldarazo para que la mediación sea una realidad en España. Así lo ha afirmado Rafael Catalá, presidente del Centro Español de Mediación (CEM), que matiza que esta norma “la posibilidad de encontrar soluciones previas a la jurisdicción es una magnífica solución que favorece la cultura del diálogo”.